miércoles, 28 de noviembre de 2007

Lara Croft

El 31 de octubre pude comprobar que mis sospechas tenían fundamento, era cierto, mis ojos lo vieron, ella estaba aquí. La actividad fue programada para dar inicio a las siete de la noche, pero Regina no apareció. Lo cierto es que fui sólo para saludarla, pues hace mucho que no la veo, ese rollo de las instalaciones y los performances no termino de entenderlo. Esperé hasta pasados diez minutos de las siete y decidí retirarme, en ese momento me di cuenta que Lara Croft venía caminando hacia mí, pensaran que estoy loco, pero es cierto, tengo testigos. Con paso firme y con voz sexi me abordó; que hacía la famosa salteadora de tumbas en cuatro grados norte, me pregunté. Claro que era difícil reconocerla, porque cargaba puesto un disfraz de La Chilindrina, de seguro iba para una fiesta de disfraces, era el día para esas cosas. Me habló con voz acelerada y me invitó a que pasara a ver una exposición de objetos que había obtenido después de saquear el cementerio la Verbena. Hubo dos cosas que llamaron mi atención, Lara llevaba en sus brazos una linda niña y estaba acompañada de un mulato canche, quien, supongo, era su guarda-espalda. Nos encaminamos al local en donde estaba la exposición, a todo esto ya nos acompañaban la conocida espía Mayakuska, con ella venía una niña cuyo porte recordada a una gran pintora mexicana. En ese mismo instante apareció la académica judía Basheva Levi; curiosa mezcla de personajes, pensé. El acceso principal al salón estaba decorado con una interesante combinación de lápidas, de todos tamaños, colores, nombres y fechas. Tratando de hacer una broma, pregunté por el botín que había extraído de las tumbas, pero evadió el tema y la conversación se fue por otro lado. En el salón de al lado se podía ver a una mujer escribiendo en la pared, como emulando a Bart Simpson. Aquello era alucinante. La actividad concluyó después de unas palabras de un español peludo. Todo estuvo muy bien, pues pude conocer a la voluptuosa mujer, protagonista de “Tomb Raider”. Lo único que lamento es que Regina no haya aparecido y a la fecha sigue sin aparecer.

Game Boy

3 comentarios:

Juan Pablo Dardón dijo...

Qué sutil pijazo! Jajajajajajajaja, me encantó.

Anónimo dijo...

Vaya que heavy, soy el visitante número mil, háganme un cuento pajero, trabajo en una maquila porque no encontré trabajo en otro sitio. Subo fruta todo el día para que el camión se la lleve empaquetada a los que sí van a tener una buena navidad. Feliz navidad para los chapines del blog, son muy pajeros los brodys pero excelente, excelente.

Johan Bush Walls dijo...

Juan Pablo: a veces es necesaria esa sutileza, jeje, uno no puede ir por la vida agrediendo a medio mundo.



Anónimo: Aunque no se ofreció premio alguno para el visitante número mil, la verdad, es una buena idea, tu cuento pajero estará listo para la próxima semana. Desde ya se hace el ofrecimiento, al visitante número dos mil se le hará su cuento pajero, bueno a todo aquel que asi lo pida.