lunes, 29 de septiembre de 2008

Cuentos tiernos o la condición humana

I
Una hormiguita visita mi azucarera, la veo de reojo, me provoca ternura el sacrificio que hace para cargar tres granitos sobre su espalda. Tarda una eternidad en salir, pero regresa, por más, esta vez viene acompañada por un enorme grupo de sus compañeritas, bien ordenadas ellas, una tras otra, con gran paciencia invaden el recipiente; ahora las veo de frente, con un poco de desesperación espero a que todas estén adentro, en ese momento derramo el azúcar en un balde que he llenado con agua hirviendo, jajaja,jajaja; cómo me divierto al verlas agitando sus patitas, tratando de escapar.

II
El perro de mi vecina, la que vive del lado izquierdo de mi casa, es un chihuahua, ella es muy guapa, y su mascota adora subirse a mis zapatos. Yo la saludo y le hago cariñito al animalito, de inmediato mueve la cola, agradeciendo el gesto, luego se cuelga de mi pantalón. Los acompaño unos metros, en su caminata diaria, después me despido y el perrito se queda viéndome con sus ojos llorosos. Mi vecino, el que vive del lado derecho de mi casa, tiene un rottweiller. Un día se lo pedí prestado, que quería salir a correr con su mascota, le dije; con mucho gusto dijo él. Lo saqué a pasear en el momento justo que mi vecina salía, su chihuahua se me vino encima, entonces solté el rottweiller, jajaja, jajaja; cómo disfrute viendo la colita moverse afuera de las mandíbulas del perrazo.

III
La lluvia es capaz de ponerme nostálgico, incluso triste, el espectáculo en la calle llega a deprimirme, más cuando es de mañana y todos corren a su trabajo. Los que esperan el bus del servicio público tampoco disfrutan los días lluviosos, ni los que tratan de cruzar de un lado a otro; pienso que debería tener un vehículo más grande, para llevar a los que se pueda y que no se mojen. Cuando voy manejando y hay tormenta, pongo la radio, para ayudarme a soportar el tedio del tráfico, pero cuando veo la gente aglomerada en la estación del bus, pienso en lo difícil que es la vida y me digo: pobrecitos ellos, entonces acelero y me acerco, lo más que puedo, a la acera, jajaja, jajaja; cómo me produce placer ver sus ropitas empapadas y llenas de lodo.

IV
Una compañerita de la oficina ha estado faltando mucho, resulta que no tiene quien le cuide a su hijo; el niño tiene dos años y no se puede quedar solo, eso sería inhumano. Ella se queja porque en estos tiempos es difícil conseguir ayuda para los oficios domésticos, dice que las maquilas tienen la culpa. El jefe la ha tolerado, hasta ahora, pero como los fines de mes todos se ponen histéricos, porque hay que enviar los informes a la casa matriz, entonces la cosa se complica; por eso, yo siempre ofrezco mi ayuda, porque la compañerita necesita el trabajo. Ahora lleva dos días de estar trabajando solo media jornada, el jefe dijo que lo siente mucho pero que las cosas no pueden seguir así, pienso que es injusto, y me armo de valor para hablarle al jefe, quien de inmediato entiende, jajaja, jajaja, la compañerita tendrá todo el tiempo para cuidar a su pequeñito y el jefe dice que yo soy la persona perfecta para sustituirla.

V
Le puse defensas a mi carro nuevo, adelante y atrás. En esta ciudad el tráfico es anárquico, los conductores son inconscientes y agresivos, si llegan a chocarlo a uno, salen huyendo o se bajan blandiendo una pistola, para convencernos que ellos no tuvieron la culpa. Por eso uno siempre anda con cuidado, tratando de no hacer daño a nadie, pero las circunstancias no ayudan. Los parqueos, por ejemplo, son la misma historia; un día estaba saliendo de uno y rocé con la defensa delantera al carrito de a la par, rápidamente me bajé a inspeccionar los daños, el artilugio funcionó, jajaja, jajaja, a mi vehículo no le pasó nada y al otro le quedó un buen hoyo, además salí rápidamente y nadie se dio cuenta.
Marito Vellosa

13 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajaj que buenisimos. saludos don Johan, siganos deleitandonos como siempre...

Anónimo dijo...

Las hormiguitas son buenas, ¡pero cuando están lejos de mi casa o de mi inestimable cuerpecito! De ninguna manera voy a emplear tu "original método de eliminación", más que nada porque lleva mucho tiempo, es caro y sólo termina con la vida de pocas.
No quiero parecer fría y desalmada, pero ayer me picó una y ¡pucha que dolió!...
¿Me cuentas otro tierno cuento para conciliar el sueño?

PROSÓDICA dijo...

jajaj me agarraste en el primero!!! me dije a mi misma: "qué le pico al Johan pa que escriba asi de cursi?".... luego por allí por el ahogo forzado de mis compañeras, te vi un poquito más claro a ti jajaja.

crueles tus historias Johan.....andamos rencorosos....se vale, se vale, todo se vale

abrazos.

Nancy dijo...

Me encantan los cuentos breves y también los crueles. Excelente lectura para una noche de lluvia, como esta.

Anónimo dijo...

Me quedo con el IV.

Dos preguntas:
1) Para conducir, ¿peor la zona 9 o la 10? Siempre usé taxi por su tierra, che.

2) ¿Por qué no tenés blogroll?

el Kontra dijo...

Excelente JBW, del III y el V he sido víctima y victimario. Salú!!!

miquelet dijo...

Excelentes cuentos. ojalá la maldad del ser humano solo se reflejara en estos cuentos tan crueles y no en la realidad.

Salud.

Anónimo dijo...

Que hijo 'e ... (lo siento, de verdad me llegaron al alma jeje) muy buenos cuentos; creo que la moraleja es bastante clara.

Anónimo dijo...

Totalmentee de acuerdo: La condición humana. Suenan algo masacres pero asi somos. Ya no vuelvo a matar hormigas con agua hirviendo, mejor las quemo. Saludos Johan!

Johan Bush Walls dijo...

Anónimo: Pues siempre que se pueda.

Chuquis: Vaya si no serán molestas las hormigas, el método del veneno es mucho mejor, pero lo difícil es darles la dósis exacta a cada una, cuesta mucho abrirles la boquita.

Prosódica: Se le extrañaba por acá maestrísima, veo que volviste con todo y blogs, por allá pasamos. Lamento mucho haberte agarrado solo en el primero. Lo haré mejor a la próxima.

Nancy: ¿Cuentos crueles?, son tiernos, de verdad. Espérate que cuente los crueles. Es broma.

Gemelo: Esperemos, a ver si nadie más quiere el IV es todo tuyo.

Aunque es relativo, puedo decir que la zona 9 tiene menos tráfico, pero no hay mucha diferencia. Mirá pues, que bueno que hayás conocido estos lares.

Leo tantos blogs que si los pongo al margen serían demasiados.

El Kontra: Todos hemos sido víctimas y victamarios, quien esté libre de pecado que arroje la primera piedra. A ver si no salgo apedreado.

Miquelet: Ojalá fuera así, pero ya ves que no, la condición humana, que le hacemos.

Anónimo: No se autocensure, aquí se vale todo.

Cristian: En realidad es mejor el veneno, a despecho de lo que escribí arriba, claro que salen huyendo, las hormigas digo, pero es efectivo.

Salú pue.

Apelaez dijo...

Don Bush, y porque no busca que le publiquen sus cosas?

Diego Fonseca dijo...

He ido varias veces a Guatemala, W. Tierra fascinante. Tengo algunos conocidos y amigos por allí.

Johan Bush Walls dijo...

En esas ando amigo Apelaez, pero no es fácil, hay que emborrachar a muchos editores, para empezar.

Diego: Ah, mirá pues, totalmente de acuerdo, esta tierra es fascinante, pero es dura para vivir.